En contraposición al turismo frenético, la elección de «viajar sin prisas» cobra cada vez más popularidad en redes sociales, con etiquetas que acumulan más de un millón de publicaciones y destinos cada vez más recurrentes para desconectar.
La temporada de viajes ha terminado para casi todo el mundo. Sin embargo, hay un tipo de turistas para los que ahora es incluso un momento mejor para viajar que durante las vacaciones de verano.
Se trata de los amantes del «slow travel». Un término que significa literalmente «viajar despacio». Y es justo lo que buscan sus amantes, viajeros que huyen del turismo masificado y frenético, de los packs de viaje, alojamiento y experiencias que llenan el horario y de las pulseritas con «todo incluido».
En su lugar, los turistas que se decantan por el «slow travel», una tendencia cada vez más popular en redes sociales y cuyo «hashtag» ya supera el millón de publicaciones en Instagram, quieren vacacionar con calma.
Por ello, a veces eligen destinos en los que, incluso, se sumergen en otras formas de trayecto y en destinos incluso peatonales.
Sobre todo, en esta época en la que el tema de la contaminación preocupa a parte de la sociedad, viajeros incluidos, algo que se ha visto incrementado durante el pasado Día mundial sin coche: turistas que, optando por el «slow travel», lo combinan con el turismo sostenible y comparten en redes sociales destinos ideales para esta tendencia.